ALBERT QUINTERO

6 de noviembre de 2013

DESEOS...


Que tal amigos blogueros, ya poniendome al dia cada semana con pensamientos nuevos, ahora le toca el turno a la poesia. Este poema lo escribi hace ya 7 años y quisiera compartirlo con ustedes. Espero les guste y compartanlo con la persona que mas aman en este instante! Ah, y no dejen de cumplir sus deseos, sean cuales sean, si en verdad la persona lo vale! Disfrutenlo!



Hace un tiempo atrás, corazón sin meta,
Mi mundo se hallaba en cierta tristeza.
Viviendo una vida tal cual cometa,
Un consuelo cada noche mi almohada era...
A ella le compartía todas mis penas...
Viviendo sin amar, fue una de ellas.

Hasta que un día, sin percatarme de ello,
Una dulce persona apareció sin avisar...
Tocando una puerta, llamando al inquilino,
Con deseos de entrar a este vacío lugar;
Viendo en su panorama un corazón de acertijo
Motivada a llenarlo de mil risas al azar.

Otra vez, sin quererlo, tal cual ilusión,
Conquistándome en tan poco tiempo,
Aliviando mis dudas a cualquier temor...
Le ha regalado vida a un triste corazón
Caminando suavemente en pasto de campo
llenándolo de cálida luz, llamada amor.

Y si mis pasiones son correspondidas,
No todo lo que se ve es color rosa.
Entre nosotros hay espacio, hay distancia
Que de dudas e incertidumbre nos embriaga.
Mis encuentros terminan en punto y coma,
Sin poderla querer, sin vernos cuando nos toca.

Fuerte quema aquel deseo de tenerla cerca...
De tan solo sentir de ella un dulce y ardiente beso,
Que muero de ganas de su piel conocerla;
Que mi cuerpo le exprese que realmente la quiero.
No más del cortejo, solo el placer de una caricia,
Que nos comprometa a ir juntos hasta el cielo!

De un deseo que aun adquiere forma,
Quiero ser, de su amigo a un vil ladrón...
Para así, sin miedo, olvidarme de toda norma
Y tenerte entre mis brazos, perder contigo la razón...
Que mis besos y caricias te liberen de aquel dogma
Y juntos bajo las sabanas entreguemos el corazón...

El tiempo se convierte en incisivo enemigo
Pues solo él junto a este incierto destino;
Toma su arma, mostrándome un desafío.
Sin inquietarme toca hacer de mi fe una prueba,
Caminar mi realidad es mi bien con certeza
Motivando a mi paciencia a no morir en la espera.

Un deseo es propio, cumplir una promesa,
El que tu corazón me llene de fortaleza.
Que el miedo que haya en mí desaparezca,
Al sentir en mis brazos tu ternura y belleza.
Si hay amor, tal cual flor, haz que florezca
Y haz que en mi castillo, tú seas mi única princesa.

No hay comentarios:

Publicar un comentario